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Ofrecemos

1_Banc au Lac Vert

Una acogida benévola, un alojamiento impregnado de calor y de sencillez, un acompañamiento discreto y personalizado, un descanso acorde con las necesidades, un espacio para la formación, la reflexión, el silencio y la oración, un lugar propicio para el compartir humano y espiritual, un contacto privilegiado con la dama Naturaleza, un oasis de paz a menudo calificado como un  » paraíso terrestre « , una experiencia de  » vida en común  » con las religiosas.

Proponemos diferentes actividades tales como las semanas o fines de semanas de silencio, encuentros de cine espiritual, paradas espirituales, talleres artísticos y otras sesiones. Haga clic en el calendario de las actividades para conocer las actividades corrientes.

Sendas del silencio


Los « enamorados de la naturaleza » pueden gozar de Sendas del silencio:

1_Affiche Boisé du silence 2_Affiche Le couloir des icônes

 

Galeria de iconos


20_Lannonciation8_Notre-Dame du Perpétuel Secours15_La Trinité

Los originales de los iconos escritos por la hermana Jeannne Blais son expuestos en la galería que separa el coro de la asamblea de la capilla de la casa San Bernardo (3r piso). Las personas que lo desean pueden vivir un tiempo de oración y de meditación en el mismo lugar.

 

 

 

Salon « ARTISTICO »


Se trata de una sala modesta donde se encuentra un « catálogo » de las tarjetas florales realizadas por una artista octogenaria: hermana Édith Fortier. Otras tarjetas a base de fotografías les permiten a los visitantes regresar a casa con un suvenir de los lugares. En este salón, también encontramos las reproducciones de los iconos de la hermana Juana Blais, lo mismo que un cuadro magnífico de Cristo en cruz del cual es la autora.

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Muro historico


A la entrada de la casa San Bernardo, podemos impregnarnos de la historia que marcó esta  » tierra santa  » desde los orígenes. Varias fotos de archivos cuentan la evolución de la obra que tuvo origen en 1898 y que no deja de evolucionar y de transformarse, esto de manera providencial. La divisa del padre Brousseau fue siempre de actualidad:  » ¡ atrévete mientras que puedes! «