Despliegue de la acción apostólica
San Cristóbal (1956-1973)
En en la ciudad agrícola y próspera de San Cristóbal que desembarcan las primeras religiosas en la región Suroeste, en 1956. Respondiendo a la llamada del padre Amalio de la orden de San Agustín, las hermanas se comparten la pastoral parroquial en varios pueblos y multitud de desiertos. Su trabajo consiste en organizar la catequesis, la formación de las hijas de María, la sacristía, etc. Un poco más tarde las hermanas se hacen cargo de la dirección de la escuela parroquial Santa Rita y dan las materias académicas de primaria.
Neyba (1957-…)
En 1957, Monseñor Thomas Reilly hace llegar hermanas en la región de Neyba. Ellas se dan a la evangelización de las personas del lugar y se preocupan de su desarrollo integral por diversos medios : catequesis, liturgia, pastoral de jóvenes y de la familia, cuidados de salud y educación. Ellas enseñan en el colegio Bartolomé en el nivel primario y secundario. las hermanas dejan Neyba en 1987. En 2005, a petición del obispo de la diócesis de Barahona y de la comunidad parroquial, las hermanas regresan a la misión, luego de una susencia de más de 20 años, para obrar en pastoral y junto a las mersonas ancianas.
San Juan de la Maguana (1974-…)
Es el turno de la ciudad de San Juan de la Maguana de recibir a las religiosas en 1974, a petición del Obispo. Su contribución en el centro Monseñor Pittini consiste en promover el desarrollo integral de la persona humana mirando su dignidad de hijas de Dios. En 1978, ellas se entregan junto a los desfavorecidos y continúan su acción pastoral, siempre bien presentada todavía hoy.
Pedernales (1976-1978)
En 1976, tres misioneras canadiences llegan a la provincia de Pedernales a fin de sostener al sacerdote. Ellas comienzan su apostolado en una región cortada de todo progreso, ellas se ocupan del cuidado de la capilla, la formación de los niños y de los catequistas y se hacen cargo de la enseñanza en primaria, la pastoral de niños y adultos. la misión se vive bajo el signos de las pruebas. En octubre de 1977, una religiosa cae en coma luego de una picadura de insecto (el anófel). Ella debe regresar a Canadá en enero de 1978. En noviembre, el sacerdote de visita en Canadá fue afectado por dos infartos. el mismo día de su muerte, un nuevo sacerdote se instala en Pedernales con otro equipo pastoral. Las hermanas parten de ese lugar. En el espacio de algunas semanas , las personas de esta región vieron morir su sacerdote, luego partir las hermanas con las cuales habían aprendido a trabajar.
Las Yayas (1978-2013)
El impluso misionero continúa en las Yayas en 1978, donde tres religiosas dominicanas colaboran con el sacerdote de la parroquia. Ellas se dividen las actividades de pastoral en las parroquias de Padre las Casas y de las Yayas. En 1979, esta población es cruelmente probada por el huracán David. Alrededor de 300 personas desaparecieron en esta tragedia. durante casi seis meses, no hay electricidad ni agua potable. Luego una epidemia de tifoidea se declara. Una hermana fue contagiada y transferida de urgencia a Santiago.
El Cercado (1980-2010)
En 1980, dos religiosas dominicanas vienen a secundar los padres redentoristas a El Cercado. Su trabajo consiste en formar comunidades eclesiales de base en los pueblos y en los campos. Ellas se ocupan igualmente de la liturgia, de la catequesis, la pastoral juvenil y vocacional, además de atender una farmacia popular. Luego ellas se retiran de esta misión en 1982 para regresar de 1987 al 2010.
Las Matas de Farfán (1999-…)
Desde 1999, otras hermanas dominicanas abren Las Matas de Farfán. Ellas aseguran una presencia en el lugar y trabajan en la pastoral parroquial.